Escuela Hogar N° 19 Jagüel del Monete (Imagen Panoramio) |
El Diputado Provincial del Bloque del Frepam, Luis Solana (Partido Socialista), presentará un Proyecto de Ley mediante el cual propone una reducción en la edad mínima exigida para la obtención del beneficio de la jubilación, para los trabajadores y las trabajadoras de la educación que se desempeñen en Escuelas Hogar, de Nivel Inicial y de Educación Especial.
El Proyecto consiste en la modificación del Art. 49 Inc a) de la N.J.F. Nº 1170, mediante el cual se establecen los requisitos de edad mínima exigida para la obtención de la jubilación, que en el caso de los docentes, está establecida en 55 años. El Diputado propone que, para el personal docente que se desempeñe en Escuelas Hogar, en Educación Especial y Escuelas de Nivel Inicial al frente directo de alumnos, la edad prevista se reduzca en un año por cada ocho años de servicios prestados en la modalidad. En la práctica esto se ve traducido en que quienes se hayan desempeñado durante 24 años en dichas modalidades puedan jubilarse con 52 años.
En los fundamentos del proyecto, Solana recoge las inquietudes y la vivencia propia de los docentes luego de realizar varias visitas a Escuelas Hogar de la Provincia, como también, estudios realizados por sindicatos docentes, y manifiesta que “la tarea docente conlleva una carga laboral física, psico-afectiva y mental que transforma cada puesto de trabajo en una situación particular”. A su entender, existen situaciones en las que la carga laboral se acentúa, y menciona a los y las docentes que se desempeñan en educación especial por ejemplo, “con alumnos y alumnas que presentan necesidades educativas especiales, lo que aumenta la carga laboral, ya que requiere mayor esfuerzo físico, psico-afectivo y mental”.
En cuanto a quienes se desempeñan en el Nivel Inicial, considera que son docentes que “enseñan, cuidan, brindan afecto a sus alumnos y alumnas, trabajan con niños y niñas de corta edad iniciándolos en la educación formal. En esta etapa, el juego y la expresión corporal cumplen un rol fundamental no como una actividad meramente recreativa, sino para la adquisición de conocimientos. Y la edad de los y las docentes, ocupa aquí un lugar central”. Además, hace hincapié en que, cuando menor es la edad de los alumnos y alumnas, mayor es el esfuerzo que deben realizar los y las docentes.
En el caso de las Escuelas Hogar (en concordancia con estudios realizados por la ONG Acción Educativa de la Provincia de Santa Fe) existe para Solana, un “secuestro” del tiempo, “donde los y las docentes, deben estar disponibles para realizar las tareas propias de la función docente, y otras que la propia denominación de estas escuelas lleva implícita, relacionadas con la palabra “Hogar”, y la enorme responsabilidad que tienen al tener a su cuidado, no solo en el aprendizaje, a niñas y niños de corta edad.
A esto, debe sumarse que en muchos casos, las Escuelas Hogar se localizan en lugares inhóspitos, y las condiciones habitacionales y laborales –otro de los factores que contribuyen a la fatiga residual de los y las trabajadores y trabajadoras de la educación- son deficientes.”
Luis Solana considera que “reducir la edad para obtener el beneficio jubilatorio de aquellos y aquellas docentes que se desempeñan en estas escuelas, será no solo una acción justa como reconocimiento a estas tareas, aliviando en una pequeña parte la fatiga residual de sus beneficiarios, sino que además redundará en beneficio del sistema educativo en general”.
Referido al mismo tema –los requisitos para la obtención del beneficio de la jubilación– cabe recordar que el Diputado socialista ya ha presentado, además, un Proyecto de Ley para que se equiparen los puntos exigidos en la sumatoria que hoy se diferencian en 95 puntos para los varones y 90 para las mujeres, igualando esta exigencia para ambos en 90 puntos.